Este martes 5 de marzo, Cine y salud, una de las nuevas secciones de este 27 Festival de Málaga, ha comenzado con el objetivo de presentar metrajes que giren en torno a temas relacionados con la salud, así como tratarlos en un coloquio posterior, fruto del acuerdo que lleva desarrollando el certamen con Quirónsalud. En esta primera sesión, el cáncer ha estado muy presente mediante la proyección de ‘La lista de los deseos’, largometraje dirigido por Álvaro Díaz Lorenzo.
El filme, que presenta a dos mujeres que se conocen en las sesiones de quimioterapia donde las dos luchan contra un cáncer de mama, utiliza esta enfermedad como hilo conductor de la trama. Ambas, a la que se suma una tercera persona, elaboran una lista de cosas que nunca se atrevieron a hacer, pero que tratan de realizar embarcándose en un viaje en caravana en el que viven experiencias inolvidables, cómicas y alocadas. Una historia llena de optimismo y vitalidad que invita a luchar y ver con buenos ojos la vida.
Tras la proyección, ha tenido lugar un coloquio moderado por Mar García Rubira en el que se han invitado al Dr. Jorge Contreras, jefe del Servicio de Oncología del Hospital Quirónsalud Málaga, y la Psicooncóloga Carmen Barceló. ‘Una cosa importante que la película transmite es la rápida actuación en cuanto aparece el primer síntoma’, ha recordado el doctor enumerando algunos de esos primeros signos que pueden alertar del tipo de cáncer más prevalente en mujeres.
Siguiendo la misma línea positiva de la película, el reconocido oncólogo ha recordado que la supervivencia a los 5 años de ser diagnosticada la enfermedad, a día de hoy, el porcentaje de supervivencia supera el 80%. Una cifra que se ha alcanzado ‘gracias a los medios y herramientas de los que se disponen en nuestro medio que permiten luchar eficazmente contra esta enfermedad, en Málaga particularmente’.
Asimismo, Contreras ha reseñado la importancia de potenciar la capacidad de tener ‘un acceso fácil a la atención médica en caso de complicación’, así como se ha mostrado exigente a la hora de dar un paso más: ‘hay que hacer una unidad de servicios de acompañamiento, nutrición, cuidados estéticos y físicos, que hasta ahora han ocupado un papel secundario’.
Paralelamente, la psicooncóloga ha destacado la dureza y complejidad de dar la mala noticia, sea tanto para el médico, el paciente y el familiar, este último considerado en cierto modo también paciente por el acompañamiento y lucha que también le caracteriza.
Siguiendo el discurso del doctor, Contreras ha mostrado una gran atención en la parte emocional: ‘los pacientes se centran mucho en lo físico, pero hay muchos movimientos emocionales muy intensos. Por tanto, se debe equilibrar esa balanza entre el cuidado físico y el mental, este último siempre más descuidado’.